Ya es una realidad, como sorpresa anticipada, nuestro trabajo de varios meses por fin está aquí. Todas contamos es vuestro. La antología benéfica, en la que he tenido el gran honor de participar con un relato, ha llegado pisando fuerte para el ocho de marzo.
Como ya habrás visto en redes desde hace unos días, hemos dado alguna pincelada cada una de las compañeras que hemos colaborado. Las maravillosas ilustraciones y la portada son obra de Paloma Martínez @lareinasincastillo en Instagram, los relatos realizados a cargo de Mercedes Alonso, Silvia Sancho, May Boeken, María Montesinos, Marisa Sicilia, Analí Sangar, Diana López Varela, Kris L. Jordan, Elena Garquin, Inma Cerezo y los poemas de Peque Zurita.

Hemos tenido la maravillosa ayuda de Lucía Álvarez coordinando redes.
Antes de despedirme, quiero presentarte a Mercury, cuando Paloma me la mostró dije: es ella.

Los beneficios íntegros, de esta maravillosa antología que no te puedes perder, irán destinados a la Asociación Mum, mujeres unidas contra el maltrato.
Aquí te dejo un pedacito de Mar de esperanza, el relato con el que participo, navega por El Mogor, Baja California…
Mar de esperanza
«La cura para todo es siempre agua salada: el sudor, las lágrimas, el mar». Karen Blixen
Quizás a Mercury le habían leído esa frase alguna vez en la vida, como cuando una canción suena en la radio y te estremece sin motivo aparente. Nunca sabría de dónde había venido, pero sí reconocía que lo había hecho para quedarse.
El mar. Su más fiel aliado, el mismo que recomponía los pedazos rotos de su alma cada vez que no se encontraba; por eso estaba allí en aquella mañana de invierno, sentada en la arena húmeda, contemplando a las gaviotas sobrevolar el agua embravecida salpicada de espuma, gris como el día que apenas despuntaba.
Había perdido el último trabajo, la última posibilidad de volver a empezar, y ya estaba cansada. Agotada de turnos infernales, compañeros similares a minas antipersona, jefes fascistas y sueldos de contrabando.
Ni siquiera sabía qué iba a hacer con las cuatro cosas que le quedaban de su anterior vida, y que había dejado en aquella habitación de alquiler, junto a él.
Se estremeció al recordar. Pensaba que ya no ocurriría, pero estaba equivocada: él todavía tenía ese poder.
No te pierdas las maravillas que contiene esta antología que ya está disponible en Amazon.
Gracias por tu colaboración,
Todas contamos.
Inma.
Foto de cabecera de Armando Castillejos en Unsplash